A. C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada
Una hermosa colección de instrucciones prácticas para la educación de niños y jóvenes en la conciencia de Krishna.
«Me alegra mucho saber que estás embarazada y, por favor, acepta todas mis bendiciones para el recién llegado que tendremos la gran alegría de recibir en unos pocos meses. Por favor, cuida tu salud para que el niño pueda crecer muy sano y se vuelva consciente de Krishna. Prahlada Maharaja estaba en el vientre de su madre, escuchó las instrucciones de Narada Muni y, posteriormente, se volvió el devoto más famoso del Señor Krishna. Todos los padres tienen el deber de hacer que sus hijos se vuelvan conscientes de Krishna como ellos, y así no tengan que renacer más en este mundo material». (Junio de 1967)
«La idea básica de crear hijos, tal como se describe en la literatura védica, es que, desde el nacimiento hasta los cinco años, los padres pueden ser muy blandos con el niño. De los seis a los diez años, deben aplicar más disciplina. Seguidamente, de los diez a los dieciséis años, los padres deben ser tan estrictos como un tigre, de manera que el hijo tenga miedo de desobedecer. Finalmente, después de los dieciséis años, los padres deben tratar a su hijo como un amigo, y este tiene permiso para desarrollar gradualmente su responsabilidad adulta y su independencia». (Julio de 1969)
«No hay ninguna regla rígida y severa de que solo se admiten [en los encuentros] a los niños grandes, de siete u ocho años, y no a los otros niños. Esto no es posible y no aprobaré semejante regla, si no que daré la bienvenida a cualquier bebé, para que la vibración trascendental pueda entrar en sus oídos y, desde el principio, pueda purificarse. No obstante, esto no significa que los niños pueden perturbar el encuentro llorando, las madres deben hacer que sus hijos estén cómodos y no perturben el encuentro». (Agosto de 1968)
«Me alegra mucho saber que Chandramukhi está recibiendo la conciencia de Krishna desde el comienzo de su vida. Esa es la ventaja del avance que realizó en su vida pasada. Por favor, cuiden a sus hijos y hagan que se vuelvan perfectamente conscientes de Krishna. Se trata de un excelente servicio. Si, gracias a vuestro esfuerzo, una o dos de las almas bajo vuestra protección alcanzan la liberación en esta vida, han realizado un gran servicio trascendental al Señor». (Septiembre de 1969)
«Gracias por tu carta del 23 de julio de 1969 y por las fotografías de tu hijita. Estas fotos son excelentes y me alegra mucho ver a Subhadra tan feliz. Me cuentas que ella ya ha demostrado un gran entusiasmo en relación a los grupos de sankirtana, entonces debes entrenarla muy bien. Si una niña piadosa como ella recibe el entrenamiento adecuado, tal como estáis haciendo Murari y tú, ciertamente ejecutará un papel muy importante en la propagación de la conciencia de Krishna. No es inusual que una niña siempre esté feliz, pero en la situación material, esta felicidad pasa muy rápido. No obstante, en la conciencia de Krishna, como el alma espiritual es por naturaleza muy feliz y bienaventurada, su felicidad solo crece más y más conforme al aumento constante de la bienaventuranza de servir a Krishna. Tu hija tiene la gran oportunidad de aplicar una solución duradera para el problema de los nacimientos en este mundo material. Por lo tanto, cuídala muy bien. Krishna será muy bondadoso contigo si lo haces». (Julio de 1969)
«Siempre me acuerdo de ti, una joven muy hermosa y consciente de Krishna. Y ahora, Krishna te ha dado una hija excelente para que la cuides. Aquí, la hija de Malati, que se llama Sarasvati, nos hace muy felices con sus actividades conscientes de Krishna. Es tan amable que, en cuanto empiezan los cantos de kirtana, ella empieza a bailar y a dar palmadas. Incluso la audiencia se queda atónita e imita sus actividades. Es fantástico. Me imagino que tu hija ya debe estar caminando a estas alturas, y por eso puedes entrenarla para que baile y aplauda». (Noviembre de 1969)
«Me alegro mucho de que tengas experiencia, talento y ganas de escribir libros para los niños conscientes de Krishna. Puedes escribir muchos libros para niños e incluir imágenes, y seguramente tendrás mucho éxito. Los libros se deben escribir en un lenguaje simple. Ante todo, intenta explicar quién es Dios, y luego cuál es la relación entre Dios, el mundo y las entidades vivas. A continuación, explica cuál es nuestro deber en esta relación con Dios. De este modo, escribe los asuntos de forma muy clara. Lo que se aprende en la infancia no se pierde a lo largo de la vida». (Julio de 1970)
«Los hijos aprenden imitando a los padres. Por lo tanto, si ustedes dos se vuelven ejemplares en la conciencia de Krishna, el niño os seguirá y avanzará de manera muy natural y fácil en la conciencia de Krishna». (Julio de 1970)
«Tú posees una inclinación natural para ser profesora de niños pequeños y creo que deberías usar ese talento para instruir a los niños de Hamburgo en la conciencia de Krishna. Los niños tienen una tendencia especial a apreciar los pasatiempos de Krishna; por lo tanto, comienza leyéndoles El libro de Krishna».
«En relación a tu hijo, no te lamentes porque sea un poco travieso. Eso es absolutamente normal en un niño —no es nada inusual. Ora a Krishna para que pueda volverse un gran predicador e intenta entrenarle en ese sentido, siendo una madre consciente de Krishna». (Marzo de 1975)
«Jamás se debe pegar a un niño… Si se le entrena adecuadamente en la conciencia de Krishna, jamás se irá. Eso significa que ha de recibir dos cosas: amor y educación. Si golpeamos a los niños, será difícil que acepten el espíritu del amor y, cuando hayan crecido, tal vez quieran irse —ese es el peligro». (Noviembre de 1972)
«Un hijo es un don especial de Krishna, pero al mismo tiempo, es una gran responsabilidad, pues los padres tienen que asegurarse que su hijo crezca en la conciencia de Krishna. Sé que lo entiendes y harás que Krishna sea el centro de tu hogar». (Agosto de 1967)
«Krishna te bendijo con una hija excelente, Ananga Dasi, y me alegra mucho saber que siente afecto por el Señor Jagannatha. Eso es maravilloso. En realidad, no hay nada de malo con que juegue con Jagannatha, pero no se puede impedir que manipule la Deidad de forma errónea, la deje en un lugar sucio o la tire según su capricho. No te será posible evitarlo siempre. Por lo tanto, es mejor que una niña tan pequeña no tenga una Deidad del Señor Jagannatha. Dejemos que crezca un poco más y pueda seguir algunas instrucciones sobre el cuidado de la Deidad, y entonces podrás dársela». (Septiembre de 1971)
«No se debe forzar a los niños pequeños a cantar japa —ese no es el camino. Deben correr y jugar». (Noviembre de 1972)
«¿Cómo debemos entrenarles? Debemos ocuparles de manera que, de una forma u otra, se acuerden de Krishna en todo momento —eso es todo. No se trata de un proceso mecánico. Si forzamos a los niños, ellos dirán: ‘No’. Somos personas, Krishna es una persona, y Krishna siempre considera nuestra relación con Él como un acuerdo voluntario. ‘Sí, Krishna, cooperaré alegremente en lo que me digas’. Esa disposición a obedecer solo es posible si hay amor. Ser forzados no hará que accedamos. Pero si hay amor: ‘Ah, lo haré alegremente’. Eso es bhakti, eso es conciencia de Krishna. Similarmente, si entrenamos a los niños desarrollando y animando su propensión a amar a Krishna, tendremos éxito en educarles en el estándar más elevado». (Noviembre de 1972)
«En relación a los niños, ellos solo necesitan saber cuatro cosas: 1) Pensar siempre únicamente en Krishna, 2) volverse devotos de Krishna, 3) adorar a Krishna, 4) ofrecer reverencias a Krishna. Se deben enseñar esas cuatro cosas y todo lo demás irá bien, y ellos se convertirán en personas eruditas». (Junio de 1972)
«Me sorprende que quieras dejar a tu hijo con otras personas, incluso siendo devotas. Es mejor que adores a tu hijo que a las Deidades. Si no puedes pasar tiempo con él, entonces debes interrumpir tus deberes como pujari. Tienes que cuidar bien a tu hijo, por lo menos hasta que cumpla cuatro años y, si después de ese tiempo, eres incapaz de seguir cuidándole, entonces yo puedo ocuparme de él. Krishna nos ha dado estos niños, son vaishnavas y tenemos que cuidarles muy bien. No son niños comunes, son niños de Vaiktunha [el mundo espiritual], y somos muy afortunados de tener la oportunidad de facilitar su avance en la conciencia de Krishna. Se trata de una gran responsabilidad, y no debes descuidarla o confundirte. Tu deber es muy claro». (Julio de 1972)
Hare Krishna! Respetables devotos, acepten por favor mis más humildes reverencias. Les felicito por este excelente servicio que prestan con amor, devoción, humildad y extraordinaria entrega en alabanza permanente hacia mi muy amado Maestro Espiritual y avatar para esta época, Su Divina Gracia A.C. Bhaktivedanta Swami Prabhupada ki jay!!